Las camas eran cómodas con luz y enchufes individuales, cada una tenía cortinas para mayor privacidad. La habitación para seis personas era pequeña, especialmente con un solo huésped adicional. La temperatura del aire acondicionado era controlada, pero se apagaba nocturnamente, lo que resultaba incómodo. Los baños compartidos estaban limpios, aunque el sensor de movimiento de la luz era problemático. La cocina no estaba equipada adecuadamente, faltaban hornallas y el electrodoméstico para calentar agua era lento. El ruido del bar de abajo era evidente, especialmente los fines de semana. La localización era excelente, a solo una cuadra de la playa.

Excelente ubicación, a 1 cuadra de la playa. Habitaciones cómodas con cortinas para más privacidad. Luz y enchufes individuales en cada cama. Baños individuales limpios. Cocina equipada y personal muy amable. Buen acceso a tiendas y restaurantes cercanos. Presión del agua para bañarse perfecta.

Nada, todo fue genial.

La habitación era muy cómoda, con aire acondicionado y cortinas en cada cama que brindaban privacidad. Me encantó el espacio, aunque era pequeño, tenía todo lo necesario para descansar bien después de un día en la playa. La ubicación, tan cerca del mar, hizo que la experiencia fuera aún mejor.

No tener toallas de baño me pareció un poco incómodo, pero quizás a otros no les moleste.

La ubicación es excelente, a solo una cuadra de la playa de Leblon. Los baños son limpios y las camas cómodas, con luces y enchufes individuales. hay una cocina equipada, lo que es muy útil.

Espacio pequeño para seis personas. La cocina carece de un anafe.

La ubicación es simplemente espectacular, a solo una cuadra de la playa de Leblon. Es como si hubiera despertado y encontrado el paraíso justo afuera, como si la arena y el mar me estuvieran invitando a una fiesta privada. Además, la habitación era amplia y los colchones tan cómodos que me sentí como una estrella de cine en una cama de lujo.

Algunos baños podrían estar más limpios.

La ubicación del hotel es excelente, a solo una cuadra de la playa de Leblon. Sin embargo, la habitación asignada para seis personas resultó ser pequeña y poco cómoda. A pesar de esto, nuestra estancia fue segura. En general, recomendaría este hotel.

Mi experiencia en el Hostel Leblon en Río de Janeiro fue maravillosa. A pesar de algunos inconvenientes con las camas y la limpieza, el personal, especialmente Miguel y Michael, hizo mi estadía excepcional. La ubicación es inmejorable y la amabilidad del equipo, inigualable. Definitivamente regresaré. ¡Gracias por todo! .

La habitación era amplia, con camas cómodas y detalles útiles como luces individuales y enchufes cerca de cada cama. La cortina permitía privacidad y el balcón era perfecto para relajarse por la noche. El personal siempre fue atento y servicial. La ubicación, a una cuadra de la playa y cerca de comercios, era inmejorable.

No tengo nada negativo que decir 😊.

la habitación era acogedora y luminosa, con cortinas que brindaban privacidad. la ubicación cerca de la playa y en una zona segura fue ideal.

aire acondicionado no regulable.

super limpio, al lado de la playa de leblon; el balcón es genial para relajarse. el personal siempre dispuesto a ayudar, y la zona muy segura. cons: por supuesto que recomiendo este hotel.

El personal es amable y servicial. Buena ubicación cerca de la playa y zona segura. Habitaciones con luz, enchufe en cada cama y cortina para privacidad. Balcón agradable para relajarse por la noche.

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna razón para quejarme.

La ubicación era increíble, siempre iba a la playa. Está cerca de un restaurante con música en vivo los sábados. El personal genial, ¡volvería sin duda! Una vez me quedé atrapado afuera, ¡15 minutos zumbando como loco! Pero solo pasó una vez en 5 días. ¡La pasé genial! ¡Saludos! Soy Gabriel, carioca soltero y amante de la exploración.